“Yo soy Felipe Pírela…”

“Por la vuelta”, es el título de un viejo tango. Billo Frómeta, lo instrumentó como bolero para la voz de su nuevo cantante en la reaparición de la “Billo’s Caracas Boys”, después de un receso de la orquesta por razones judiciales. En 1960, Felipe Pírela iba a conocer el camino de una automática popularidad. El bolero y el estilo de los “mosaicos” (boleros y guarachas juntos), al lado de “Cheo” García le harían famoso. Ya su figura como cantante modesto y tímido había aparecido en “Show de las Doce” de Radio Caracas Televisión con la orquesta “Los Peniques”. Luego como solista, y de la mano del músico dominicano “Porfi” Jiménez (que hacia memorables arreglos de tangos a boleros), habría de romper records de ventas discográficas y se consagraría como el “Bolerista de América”. “La melodía de Felipe era tan maravillosa que su voz prácticamente dirigía la orquesta”, me dijo una vez el propio “Porfi”. En 1972, a los 32 años de edad en lamentables circunstancias apareció muerto en Puerto Rico. Desde hace unos días en las salas de cine se proyecta “El Malquerido”, una acertada producción de Diego Rísquez, protagonizada por Jesús “Chino” Miranda, que ofrece una versión de la vida del controvertido artista. Curiosamente, salgo del cine y “afuera es noche y llueve tanto…”