El conflicto en la frontera con
Colombia además de las explicaciones económicas, territoriales, sociales y
políticas, tendría también un efecto electoral. ¿De qué se trata? Tanto Maduro
como Santos enfrentaran consultas electorales próximamente, que si bien es
cierto que en ellas no está en juego la Presidencia; podrían influir
desfavorablemente en el manejo de las situaciones internas. Quiérase o no, los resultados
de la actual conflictividad influirán a favor o en contra en las elecciones
parlamentarias venezolanas del 6 de diciembre. Para Santos, si bien no tomó la
iniciativa del cierre de la frontera, el malestar generado por las deportaciones
y el alza de precios en la gasolina y en los alimentos en Cúcuta y en las zonas
cercanas, podrían rebotar en su contra en las elecciones para gobernadores,
diputados de las asambleas departamentales, alcaldes de municipios, concejales
municipales y ediles de las juntas administradoras locales programadas para el
25 de octubre. Maduro con el Estado de Excepción al igual que con el “Decreto
Obama” y el manejo del tema de Guayana buscaría mejorar la tendencia en las
encuestas que le resulta desfavorable. Para Santos, que inicialmente apostó al
diálogo y al acuerdo con Maduro para afrontar la situación; el cuadro es
distinto. Su terco contendor Álvaro Uribe y las fuerzas que lo apoyan sacarían
ventaja estimulando, tal como lo están haciendo, un natural sentimiento
nacionalista, lo que podría significar un nuevo obstáculo en el Proceso de Paz que
adelanta con las FARC y que constituye la carta fuerte de su gobierno. Nadie
sabe para quien vota.
No hay comentarios:
Publicar un comentario