EL “CHE”: NO A LA
GUERRILLA
La primera vez que el Ché Guevara vino a
Venezuela no fue como suele creerse en el accidentado periplo latinoamericano en
compañía de Alberto Granados que lo llevó hasta la sierra de Mérida. En
diciembre de 1950, a
los 22 años, estuvo en Caracas invitado a un evento de la juventud copeyana. En
esa oportunidad, fue atendido por el dirigente José Rafael Zapata Luigi, quien
lo recordaba años después ante el periodista Alberto Jordán Hernández como “joven,
delgado, humilde, con una chaqueta maltratada, camisa sport y un discreto
maletín que constituía su equipaje”. Se cumplía un mes del asesinato del
presidente de la Junta Militar
de Gobierno, Carlos Delgado Chalbaud. Se proponía llegar a México. Los anfitriones
le facilitaron un pasaje a Santo Domingo, desde donde, aventurero al fin,
habría de seguir hacia la capital azteca.
En los años sesenta se especuló sobre el
interés del Ché en venir a Venezuela. Incluso, en 1966, cuando Luben Petkoff
acompañado por Arnaldo Ochoa y otros combatientes cubanos, desembarcaron en las
costas de Tucacas y se integraron a la guerrilla de Douglas Bravo, y se llegó a
sospechar que entre los invasores se encontraba Guevara.
Sin embargo, Domingo Alberto Rangel aporta un
testimonio de primera mano. El líder del MIR viajó a La Habana en 1961 en compañía
de Simón Sáez Mérida. Entonces los recibió Guevara para examinar el caso
venezolano. “Yo no he encontrado un país en América Latina que tenga un fervor
tan grande por la democracia representativa como Venezuela” les dijo de
entrada. “Ello se explica porque ustedes no han tenido sino tiranuelos en el
poder, no han conocido la democracia como la conocieron los cubanos con Prío, Grau,
etc., o la han conocido los mexicanos con el PRI. ¿Por quién estuvieron presos
ustedes bajo Pérez Jiménez? ¿Por quién sufrieron persecuciones? Por la
democracia”.
Guevara continuó: “Ahora ustedes pretenden que
en dos años la democracia dejó de ser bella, perfecta y deseable. ¿Le van a
decir a los venezolanos que la democracia por la cual ustedes los invitaron a
pelear ya no sirve?”. El Ché reconoció que la lucha armada estaba planteada en
América Latina, pero que existían prioridades. Al despedirse, les repitió: “Venezuela
debe ser uno de los últimos países en iniciar la lucha armada, precipitarla ahora
es un gran disparate”.
El 9 de octubre de 1967, después de aventuras
guerrilleras en África y en América Latina, Ernesto “Che” Guevara es asesinado
por el ejército boliviano y por agentes de la CIA en La Higuera, Bolivia. El “Che”
se hace mito.
No hay comentarios:
Publicar un comentario