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Análisis

                                             INFLACIÓN Y  SALARIO MÍNIMO

La inflación en Venezuela alcanza niveles incontrolables que para algunos expertos ya podría tratarse de un cuadro de hiperinflación. Al margen de las explicaciones estructurales el fenómeno se ha hecho más grave por la tardanza en aplicar medidas pertinentes o la timidez e insuficiencia de algunas decisiones anunciadas  hace ya unos meses. Una grave consecuencia como es obvio es el deterioro de los salarios, es decir,  del poder adquisitivo de la población. Un descalabro que se hace mucho más severo en el caso del salario mínimo nacional que si bien ha sido incrementado recientemente mediante decreto presidencial, sigue siendo abiertamente inferior al promedio del costo de la vida.

            La Asamblea Nacional discute un proyecto de ley presentado por la bancada de Primero Justicia que procura un incremento del salario mínimo con un esquema, que de alguna manera,  plantea un mecanismo de indexación de los niveles inflacionarios  con el ingreso básico. El planteamiento ha sido criticado incluso por parlamentarios opositores como el economista José Guerra quien en todo caso, aunque ella no sea la respuesta adecuada se inclina por un aumento general del salario, recurso que ha venido usando el gobierno para atenuar el acelerado desbordamiento de los precios  de bienes y servicios de toda naturaleza.

            Si bien el proyecto legislativo de indexación y los decretos de ajuste salarial cumplen con un principio de justicia social frente a las diversas y graves  calamidades que afectan a la mayoría de la población, sin embargo no abordan el problema de fondo. Derrotar la inflación además de las medidas de estabilización cambiaria, de la flexibilización de los controles en la asignación de divisas y en el precio de todos los productos, ya no sólo los que se consideran básicos, solo será posible mediante una política integral capaz de generar confianza en los inversores y por esta vía incrementar la producción y la productividad nacional. Una tarea que solamente es posible mediante un amplio acuerdo del sector público y los gremios que reúnen a los emprendedores y productores.